GARGOLAS

En las cornisas de muchos edificios goticos sobresalen las figuras de unos fantásticos y diabolicos seres que cumplen la función de desaguar el agua de la lluvia.
Estos seres son gárgolas, por el día nos pueden parecer obras de arte, pero al caer la noche su sombra proyecta figuras aterradoras.
En muchas ciudades de Europa cuentan que de noche las gárgolas cobran vida y salen a saciar su hambre. Dicen que cada vez son mas voraces y terribles y que nutren su odio con el fanatismo de la gente.Hay quienes afirman que con el paso de los siglos se han ido volviendo mas terroríficas debido a tantos crímenes como han visto cometerse desde sus tejados.
Permanecen en silencio, observandonos, acechandonos. Pueden llevar siglos sin moverse pero desde la altura de su cornisa nos están juzgando.
Existe una leyenda sobre las gárgolas de la catedral de Nuestra Señora de la ciudad francesa de Ruán y que ha sobrevivido de generación en generación y que se recuerda cada 30 de Mayo desde el año 1431. Aquel día en la plaza del mercado viejo de Ruán llevaron a la hoguera a una joven llamada Juana de Arco, acusada de herejía por afirmar que podía hablar con Dios y que le había pedido que salvara a Francia en la guerra de los 100 años.
Según cuentan aquel día hubo tal exibicion de fanatismo que las gárgolas despertaron y asolaron la ciudad por la noche.
Desde las cornisas de la catedral observaron el macabro espectáculo y decidieron vengar aquella muerte.
A la mañana siguiente aparecieron las calles de la ciudad los cadáveres de muchas personas que habían asistido al acto y que difrutaron viendo como se quemaba.
Extraído del bestiario, el libro de los seres que nunca existieron de editorial libsa.