Ya estoy aquí. Pero esta vez solo, sin ti.
Siento frío, ganas de llorar, una eterna tristeza, el silencio...
Algo se mueve dentro de mi. Una lágrima sombría asoma por mis cerrados párpados.
Los mismos párpados que no querían cerrarse para no dejar de verte.
Ahora me pudro en mi tumba, en el gris cementerio que tantas veces recorríamos.
Solo "CON AMOR", pone en mi lapida. Seguro que se te ocurrió a ti.
Ahora no tengo prisa, te podre esperar eternamente. Mi amor.
Bello epitáfio y bello poema oscuro.
ResponderEliminarBesos
Precioso texto...
ResponderEliminarEso sí que es un amor eterno.
ResponderEliminarUn saludo!
Esta despedida encaja perfecta en su doble significación. ¿Acaso, no quedamos atrapados en una eterna tristeza, sumergidos en un silencio doloroso, cuando la imagen de nuestras querencias decide marcharse? ¡Interesante analogía!
ResponderEliminarUn abrazo!!
Hola eluge , me ha encantado el final de esa carta que espero algún día publiques.
ResponderEliminarPor cierto gracias por tu visita a mi blog, se que estoy desaparecida, pero ya sabes el trabajo…
Besazos.
:( "me pudro en mi tumba"
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