Cansado y vacío caminaba, pensativo, solitario, perdido en los rincones de mi cabeza.
Rogando al dios de los muertos que se acordase de mi.
Buscando respuestas a tantas preguntas. Dolido.
Camine sin rumbo un par de horas y me detuve en un oscuro portal, antiguo.
Un rayo de luz entro por mi cabeza, por mi alma iluminando los oscuros rincones de la melancolía. En ese instante mis penas se fueron lejos, muy lejos.
Pude ver como eran enterradas, sepultadas para siempre?.
No!. Ese segundo me trajo un mar de lágrimas, de recuerdos con un sabor dulce que ahora amargaban, en ese mismo portal te besaste con el que hoy es tu amor, en ese mismo portal que un día nos juramos amor eterno.
El destino a veces es muy traicionero y el amor también.
ResponderEliminarMe encantó. Besos y susurros muy dulces
hola eluge, meses sin visitarte, y no porke no kisiera,
ResponderEliminarsolo por ke ingrese, me operaron de la cabeza,
veo ke siges con el bolg como antes, con las entradas muy bonitas, esta entrada es preciosa, un fuerte abrazo
Me encanta tu blog y ts entradas, sin duda volvere.
ResponderEliminarBesos.