EL JARDIN

Acababa de perder el tren de regreso,a si que me dirigí a la ventanilla para comprar otro billete.


-¿Que hasta mañana no sale otro tren?.


Joder,pensé ,pero no tenia elección compre el billete y deje la maleta en la consigna de la estación. Me senté en un banco a leer una revista,mientras los rayos de sol entraban por los enormes tragaluces. deje de leer y me asome a la ventana,con el dia tan bueno que hace,por que perder el tiempo aqui sentado.Un enorme jardín rodeaba toda la estación,salí del recinto y me fui a pasear.

El lugar era impresionante,un río lleno de barcas recorría el jardín,cientos de especies de arboles llenaban el interior,puentes,parterres,fuentes y un pequeño palacete justo en el centro.

El tiempo se me paso volando,no podía dejar de admirad aquel sitio tan bonito,las ardillas se acercaban a comer de mi mano,los pajaros cantaban sin parar,era como un inmenso jardín del Edén en pleno siglo XXI.

La tarde comenzo a caer y el calor fue bajando a si que decidí sentarme al lado de una fuente que representaba a una mujer vestida con una tunica atada a un arbol,rodeada de unos seres desconocidos para mi.

Casi sin darme cuenta me quede un poco dormido,y al despertar un escalofrío recorrió mi cuerpo,unas mujeres vestidas de blanco como la que habia en la figura de la fuente,corrían por los distintos caminos del jardín como si huyeran de algo,las seguí con la mirada hasta que desaparecieron.Pero cual fue mi sorpresa cuando al mirar al frente la fuente no estaba,nada de lo que había visto antes de quedarme dormido seguía en el mismo lugar. Sentí frío,me puse a caminar apretando un poco el paso,estaba perdido,por mas vueltas que daba volvía al mismo lugar,era como si diera vueltas a un circulo sin fin.


La noche empezaba a caer,y no sabia si eran los arboles o era yo el que daba vueltas sin ningún sentido.


Mirase donde mirase no veia a nadie,algo que empezo a parecerme extraño y ala vez bastante preocupante.

De pronto algo hizo que todo el desorden se detuviera.Un relámpago ilumino la oscura noche,a este le siguió un trueno,y de repente cientos de ojos me observaban desde todas partes.Era como si el enorme jardin hubiera cobrado vida.

Intente correr,pero las raíces de un árbol próximo me agarraban el pie.Como pude me solté ,y corrí,ya veis si corrí,mas que un alma que se va a llevar el diablo. Aquellos ojos parecian salir de los arboles. Me estoy volviendo loco,esto no puede ser real me dije.

Las mujeres vestidas con la tunica blanca se acercaron iniciando una macabra danza entre los arboles, era un baile de locos, como si los truenos pusieran la música y ellas se bailaban a su ritmo.Se acercaban y se alejaban,se acercaban y se alejaban,riendo ,cantando.

Yo temblaba, quería correr y no podía, quería gritar y mis gritos se perdían en la nada, las risas cada vez eran mas fuertes , el viento agitaba a los arboles que me miraban sonriendo danzando el baile de la muerte, de mi muerte.

A los pocos minutos un dolor insoportable empezó a aparecer por mis pies.

Las raíces de los arboles me atravesaban,el dolor subía por mis piernas. Aquella mujeres me tocaban y se reían, se acercaban y se alejaban.

Notaba como seguía subiendo aquel enorme dolor, me llegaba hasta la espalda. De repente mi cuerpo se levanto del suelo empujado por las enormes raíces que me atravesaban.

Gritaba, gritaba pero nadie me escuchaba. Aquellos cánticos, los arboles danzando a merced del viento los truenos que no cesan....Por mi boca salían ramas, de mis ojos ramas.Seguía sintiendo dolor, un dolor extraño, pero ya no podia gritar.

Mi cuerpo ahora rígido como una estatua de madera, se mecía con el viento, los pajaros venían a posarse en mis brazos convertidos en ramas.El sol calentaba mis hojas y los visitantes se tumbaban a la sombra.

Que mas podía pedir, despues de todo seguia vivo, o tal vez eso me repetia para creer que lo estaba.